(En esta bonita composición se ve a don Alberto escribiendo la que tal vez sea la más gloriosa fórmula de la física. Observen la cara de pasmo/culo que pone el menda que está a su lado. ¡Gloria eterna a don Alberto!).

Los objetos caen por la fuerza de la gravedad o por su propio peso. (Brillante frase extraída de una lección de balística militar impartida por un brigada tardo-franquista).

Decíamos ayer que una de las grandes aportaciones de la Relatividad Restringida/Especial era la nueva visión sobre la luz y su valor fundamental para desentrañar los arcanos del Universo. ¿Recuerdan? ​Prosigons.

Vaya, me olvidaba de otra cosilla que les alegrará el día: no existe en el Universo universal nada que esté parado; nada de nada, se lo juro por mis ninios. En este maldito Universo todo se mueve con energía digna de mejor fin; desde los raquíticos quarks hasta las gigantescas galaxias. El no-movimiento no existe; y si no hubiera movimiento no habría gravedad, ni tiempo, ni espacio ni Fanta de naranja. Bueno, no adelantemos acontecimientos y vayamos paso a paso por el sendero luminoso. Einstein, y por si fuera poco, también demostró que el Universo se hallaba en perpetua expansión, lo cual es uno de los descubrimientos más brillantes de la ciencia. Pocos años después, el astrónomo Edwin Hubble confirmó experimentalmente esa expansión. ¿Y qué  es lo que se mueve? Pues to lo vivo, toda la materia, la energía y por ahí. Ya ven, un Universo familiar, amable y tranquilizador, sobre todo tranquilizador.

¿Y qué es lo que mueve el jodido Universo? Correcto, la energía. Todos los bichos del Corral se están moviendo se están moviendo, de una manera u otra (o de varias maneras), impulsados por una forma u otra de energía. ¿Y qué es la energía? Ni idea, pero hay mucha literatura sobre el asunto. Se suele definir como la capacidad para realizar un trabajo (véase Wikipedia y sucedáneos). He puesto capacidad en cursiva, porque me resulta difícil de entender que la energía sea una capacidad. Eso remite a lo inmaterial y teórico, alo potencial; y la energía se manifiesta a capazos en cualquier lugar del Universo. Ítem más: ¿La capacidad de quién o de qué? En fin, como se comprueba hasta el agotamiento, el mundo mundial está lleno de fenómenos que no entendemos demasiado bien. Por eso para definirlos utilizamos metáforas, circunloquios, eufemismos, símbolismos, reducciones lingüísticas y demás. Voy a ensayar una definición, a ver qué pasa: energía es todo agente/magnitud/variable física precursora de movimiento. ¡Toma ya! En este Universo traidor, todo bicho existente danza la interminable danza del sinsentido al filo de la navaja. Y es la energía la que lo mueve. Asines el estudio de la energía en sus múltiples manifestaciones es de extrema importancia. Tira p’alante: ¿podríamos suponer que en el fondo del fondo la energía es movimiento de materia?

En la Relatividad Restringida/Especial, como hemos tenido ocasión de examinar, se establece un tipo de energía denominada en reposo, determinada en la que tal vez sea la fórmula más brillante de la historia de la física: E=mc2. En este caso, la energía –E- no produce movimiento alguno, se dirá muy sensatamente. Pero es que esa energía solo se realiza/verifica/produce/manifiesta/es cuando la masa –m- se pone en movimiento en circunstancias especiales y brutalmente potenciada por el cuadrado de la velocidad de la luz –c-. Hasta ese momento es solo energía latente, en potencia, quieta parada; por tanto energía virtual. Pero hay otra cosa genial en esa fórmula: la equivalencia entre materia y energía. Y que la energía que contiene cualquier bicho material es brutalmente brutal. Y eso es la reostia. No obstante, lo difícil de la cosa es desencadenar toda la energía que encierra un objeto con materia. Por lo demás, si se tiene presente la cantidad de energía que produce una central nuclear utilizando minerales radiactivos, se entenderá mejor la cosa de la gigantesca cantidad de energía que puede escupir un mineral, por ejemplo. Otra faceta crucial del asunto es el paso de materia a energía y p’atrás. Si tenemos en cuenta un coche, veremos que el combustible (materia, energía química), se convierte en energía mecánica mediante la combustión. Y así todo. Hasta aquí vamos de coña. Lo jodido es convertir energía en materia. Muy difícil. Se dice que en el principio del Principio, lo único que había era un porrón de energía escopeteada, que al enfriarse (ralentizar su movimiento, ¡ah!) parte de ella se convirtió en las primeras entidades materiales, los quarks. Y arreando, que es gerundio.

Bueno, bueno. Hasta aquí hemos examinado las novedades que aporta la Relatividad Especial/Restringida y sus derivaciones; amén de algunas elucubraciones de mi cosecha. En el próximo rollo macabeo examinaremos el otro gran asalto a la física que hizo Einstein.